El pasado 5 de julio se celebró la primera edición del Congreso en Derecho Empresarial: Inteligencia Artificial, Legaltech y Compliance organizado por UNIE. Esta universidad forma parte de Planeta Formación y Universidades, la red internacional de educación superior de Grupo Planeta, que cuenta con veintidós instituciones educativas en España, Andorra, Francia, Italia, Norte de África, Estados Unidos y Colombia. Cada año más de 120.000 estudiantes, procedentes de 114 nacionalidades, se forman a través de sus escuelas de negocios, universidades, escuelas superiores especializadas y centros de formación profesional. Planeta Formación y Universidades representa el compromiso del Grupo Planeta con la educación universitaria y la formación profesional. Pero Grupo Planeta, a través de su venture corporate Fabrik, también participa en un proyecto de robotización de procedimientos automatizados tan prometedor como Aidea Legal. Pero volvamos al Congreso, porque nos interesó especialmente su enfoque: permitió analizar cómo legaltech y la inteligencia artificial ‘aterrizan’ en áreas como la propiedad intelectual, la propiedad industrial y el compliance, una visión que debería producirse en más ocasiones. Para conocer más a fondo los detalles de este ecosistema hablamos con las alma mater del Congreso, dos brillantes juristas que, entre otras cosas, defienden con asertividad que conocimientos vinculados a legaltech, compliance, ciberseguridad, etc., deben empezar a impartirse en un Grado de Derecho. Muy, muy interesante lo que nos contaron María José Molina, jurista, profesora acreditada, doctora y secretaria general de UNIE Universidad, y Miriam Martínez, abogada en ejercicio, directora del Grado de Derecho en UNIE y Profesora y Doctora de derecho mercantil, a las que se sumó nuestro talento en prácticas, María Romero, estudiante de Derecho en la URJC.
Cosas que nos han gustado mucho al asistir a este evento. El primero, que Planeta Formación y Universidades, que forma parte de Grupo Planeta, haya creado UNIE Universidad, en cuya web luce un claim más que significativo: «La universidad con ADN empresarial de Madrid». A partir de ahí, nos parece muy relevante que en el Grado de Derecho hayáis creado esa mención especializada en legaltech, que suma 36 créditos con asignaturas como ciberseguridad, IA, big data, incluso marketing online. Insisto, en el Grado de Derecho, no en un Posgrado, y eso no ocurre a menudo, por no decir casi nunca.
María. Como estudiante de la Universidad Rey Juan Carlos, venir a estos sitios es otro mundo, un concepto completamente diferente, ya no sólo por las instalaciones sino por las iniciativas tan innovadoras que proponéis, como la de este Congreso.
Miriam. Como decías, nosotros tenemos en el Grado de Derecho esa mención en Legaltech, y también otras dos menciones especializadas en Compliance y Negocios Internacionales. La idea de estas menciones, y es mi empeño personal como directora del Grado, es acercar la especialización que demanda a día de hoy el mercado a los estudiantes desde el Grado. Las menciones te permiten adentrarte en los sectores más demandados en el ámbito jurídico, y prueba de ello es lo que se ha expuesto en las mesas de este Congreso. Nos parece importante que el estudiante sepa desde el Grado si quiere dedicarse a eso, y que luego pueda tener una especialización mayor con un postgrado o máster con prácticas específicas en algún lado. Le ofrecemos la posibilidad de adentrarse en el ámbito del legaltech, el estudiante ya no puede ignorar este mundo. Además de una especialización, son unas competencias básicas que el estudiante que pretenda ser jurista debe tener.
María José. Participé en el origen de la definición de este plan de estudios, y en ese momento se hizo una comisión de expertos, tanto internos como externos, para poder testar con ellos qué ámbitos o áreas de especialización estaban siendo demandados por el sector legal, para permitir que nuestros egresados se pudiesen introducir en el mercado laboral de una forma óptima y debidamente formados. Se configuró en el diseño de este plan de estudios que el alumno, desde la formación propia del Grado, fuese obteniendo en este caso una orientación práctica y profesional, que le permitiese ir perfilando cuáles podrían ser sus intereses de cara a una especialización profesional futura.
¿El Grado es el mejor momento, el más adecuado, para desarrollar estos conocimientos? Debo deciros que el feedback que nos ha llegado al respecto no siempre considera plausible esta posibilidad, aunque nosotros, particularmente, la aplaudimos con las orejas.
María José. Según mi experiencia como profesora de Grado, donde he impartido materias en los diversos cursos que conforman títulos universitarios de Grado y he gestionado el trabajo final de Grado, así como la asignatura de prácticas externas, ya se ve ese crecimiento natural del alumno, esa madurez, ese desarrollo formativo, y creo que por qué no se pueden introducir ámbitos concretos del sector legal. Por supuesto, no puedes desarrollarlo con unos contenidos pensando que están los estudios en un nivel de posgrado, porque el nivel de madurez es diferente. Seguro que para muchos estudiantes de primer curso parte de los contenidos que están siendo tratados en el Congreso quizás no les resulta todavía muy próximos porque no han llegado todavía a ese nivel de formación, pero yo creo que desde un planteamiento apropiado para lo que es ese nivel formativo, por qué no. A mí me parece que es adecuado, y en la experiencia que he tenido como profesora en los distintos cursos que componen el grado con estudiantes que cursaban el grado como titulación simple o el doble grado que combinan con ADE o con relaciones internacionales, la verdad es que es posible tener una especialización propia de ese nivel formativo de Grado. Insisto, con unos contenidos, con unas competencias, con unos resultados de aprendizaje que sean los adecuados para este nivel formativo.
Miriam. Coincido con lo que está comentando María José, porque creo que las nuevas generaciones han adelantado muchísimo. Cuando yo estudiaba la carrera, al terminarla no sabía redactar una demanda. Eso ya no pasa ahora, por eso tenemos una sala de vistas en la universidad, también se ha adelantado ese proceso de aprendizaje al Grado y también se ha adelantado el ámbito de la especialización. El otro día estábamos en Uría Menéndez en conversaciones para realizar un convenio de colaboración y nos decían que, ahora, los buenos perfiles los captan desde segundo de grado: captan esos perfiles y los incorporan a un departamento específico. Es verdad que esa especialización es muy inicial, y los van rotando por diferentes departamentos para que tengan una visión general. Es lo mismo que el grado que tenemos aquí: le damos la visión general, pero les vamos enseñando cositas que pueden llegar a ser una especialización de futuro. E insisto en que el mercado lo demanda: un alumno que se vaya a Uría, a Garrigues o a cualquier despacho de renombre, si tiene conocimientos específicos en ese sector, tiene las puertas abiertas mucho más abiertas que cualquier otro graduado raso, por decirlo así.
María José. En nuestro plan de estudios se incorporan las menciones, pero no es a costa de esa formación generalista básica, que es esencial y que debe tener cualquier jurista. De hecho, nuestro plan de estudios de Grado en Derecho se ha sometido a los proceso de verificación determinados por la Administración educativa con un resultado favorable En ese sentido, nos sentimos muy orgullosos de un plan de estudio que en la primera iteración ya superó ese filtro, con lo cual podemos considerar que no veían como algo inapropiado el incorporar menciones de especializaciones en tercero o cuarto de Grado. Pero lo importante es reseñar que no es a costa de reducir el contenido esencial e indispensable.
María. Os escucho hablar y me dais muchísima envidia. Sí que es verdad que veo una brecha enorme entre las universidades privadas y las universidades públicas. En mi universidad es impensable que hagan algo remotamente parecido, porque las formas de enseñanza considero que están muy obsoletas. En las últimas asignaturas, la enseñanza se ha basado en un PowerPoint y el profesor leyéndote. Si el alumno es autodidacta y quiere profundizar en algún tema, tiene que hacer como yo y cursar un curso experto en compliance complementario a la carrera, pero dentro de la carrera no hay ningún tipo de mención o de alternativa.
María, vas a empezar cuarto del Grado de Derecho. ¿Te ves capacitada para tomar decisiones en cuanto a tu especialización?
María. Seguro que sí, porque desde que he empezado las prácticas en Derecho Práctico, hace relativamente poco, he aprendido que las legaltech y todo el tema del derecho digital es algo que ya está aquí.
Miriam. Y tú en ese momento del Grado ya sabes como alumna qué es lo que te gusta. De hecho, ya has tenido dos cursos antes para discriminar aquellas partes del derecho que sabes que no te interesan tanto. No quiere decir que las aparques y que nunca vuelvas a tratarlas. Yo hice carrera académica sin pensar nunca que iba a ser abogada en ejercicio, y de repente un día te metes en otra dinámica profesional y te reinventas, pero sí que un estudiante de segundo, de tercero, ya empieza a tener unos conocimientos para saber discriminar lo que le gusta y lo que no le gusta de la carrera.
María José. En cualquier caso, respecto al plan de estudios del Grado en Derecho de UNIE Universidad, el alumno que se matricula no está obligado a hacer una de esas menciones. Damos esa posibilidad, pero puede ser que haya un alumno que no lo tenga todavía muy claro y decida la selección de asignaturas optativas señalando aquellas que le resulten de interés, con la posibilidad de combinar asignaturas optativas de diversas menciones (legaltech, compliance o negocios internacionales, por ejemplo). Sin embargo, podemos identificar entre nuestro alumnado a perfiles que ya desde tercero tienen una inquietud, un interés o se le despierta una curiosidad por saber algo más, y se enfocan en una mención en concreto.
Creemos que esas menciones están orientadas al foco que habéis puesto en la empresa…
María José. Sí, pero la formación que reciben nuestros estudiantes les permite optar a otras salidas profesionales. Es una formación que les va a posibilitar, si así lo desean, opositar para el acceso al empleo público, dedicarse a ser abogado de familia, ser experto tributario o laboralista, por citar algunas alternativas.
Miriam. Así es, introducir esas menciones no implica que la base del derecho en todas sus ramas jurídicas se reduzca.
María. Sin embargo, es más fácil que se despierta esa inquietud cuando sabes que existen ciertas alternativas. Yo, por ejemplo, no sabía lo que era el compliance hasta que no me puse a investigar sobre ello, porque en la carrera nadie mencionó nada sobre legaltech, compliance, inteligencia artificial, blockchain… Nada de eso. Entonces, el hecho de tener una optativa o una mención que aparezca a la hora de hacer la matrícula puede interesante, pero si en ningún momento te hablan de ello en la carrera, es muy complicado.
María José. Tengamos en cuenta que el sector legal en este país, hasta hace algunos años, no ha sido muy receptivo a los cambios, a la innovación. Cada vez más, afortunadamente, hay una mayor apuesta por el cambio y por innovar. Aunque podemos encontrar aún posturas con una visión más tradicional de la formación que tiene que recibir el futuro jurista.
Y eso se traslada también a muchos claustros universitarios. Pero sigamos, porque tenemos que deciros que nos ha molado mucho este Congreso. Entre otras cosas, porque está poco explorado, y no sé muy bien por qué, el espacio que vincula a la inteligencia artificial y legaltech con compliance y propiedad intelectual e industrial: la tecnología tiene un impacto decisivo en estas dos disciplinas.
María José. Sin duda alguna. La tecnología, en cualquier ámbito, ya tiene un impacto, y ha emergido para quedarse como transformación digital constante. Ese planteamiento del Congreso fue una idea original de Miriam que resulta ser relevante, y además es un camino que hay que recorrer a nivel legal, empresarial y en la gestión de cualquier negocio.
Miriam. Bueno, aquí he de decir que esa vinculación la veo fácil por mi especialidad. Soy doctora en propiedad industrial y derecho de la competencia, y he trabajado previamente en internet of things, el primer paso hacia la IA. Ahí fue el primer momento en que se empezó a ver muy fácil la relación que existía entre la protección jurídica de intangibles, propiedad intelectual e industrial y el ámbito jurídico llevado a ese extremo. Me parece un nicho de mercado por explorar tanto académicamente como a nivel profesional. En el despacho soy la socia directora del área de derecho mercantil y fundamentalmente llevamos todo el tema de propiedad intelectual. He de decirte que hay una avalancha de asuntos relacionados con la protección jurídica de software, intangibles, una marca que he incorporado al comercio electrónico, etc. Todo el tema online, por hablar en términos más antiguos, es una avalancha. Y académicamente, se abre una nueva forma de enseñar propiedad intelectual e industrial adaptada a los campos que ahora mismo están demandando esa especialización. De hecho, estamos trabajando en un máster, que esperemos que vea la luz el próximo año, que va orientado a todo esto. Ya no se puede estudiar, desde mi punto de vista, cualquier tipo de titulación alejado de lo que pasa en la práctica, por lo menos en el ámbito jurídico. La aplicación práctica más potente a día de hoy de la propiedad intelectual e industrial es la inteligencia artificial. En este Congreso, hemos sabido que las propias empresas están haciendo políticas de cumplimiento normativo relacionado con la inteligencia artificial.
María José. Me permito hacer otra referencia. No se puede formar hoy en contratación mercantil dejando de lado la contratación electrónica, porque prácticamente hoy día la inmensa mayoría de ciudadanos , a poco que hayan interactuado en la red, ha realizado alguna contratación electrónica.
Miriam. Todo esto ha sido un boom. No había nada, y de repente todo el mundo se dedica a lo mismo. Por ejemplo, clientes que dicen que su empresa está desarrollando una app y un trabajador freelance que desarrollaba el software, de repente, se va a otra empresa y resulta que empieza a desarrollar la misma app que yo he registrado. Hay que proteger todo esto.
A modo de conclusión, ¿recomendáis a María y cualquier otro estudiante de Derecho de la generación Z que se especialice en estos ámbitos? ¿Es una buena salida profesional?
Miriam. Es una buena salida profesional, pero aquí no soy objetiva, porque tengo la grandísima suerte de dedicarme profesionalmente al área de especialización jurídica que me apasiona.
Vale, pero hay negocio ahí, ¿verdad? Y ojo que no es una microespecialidad, requiere una preparación técnica muy exigente.
Miriam. Sí, es una especialidad muy técnica. Por ejemplo, cuando estudias patentes y analizas la patentabilidad en los diferentes ámbitos de la tecnología, tienes que estudiar biología, tienes que estudiar farmacia, debes adentrarte técnicamente en sectores en los que esa especialización es la bomba en el mercado, pero que te obligan a adentrarte en esas otras disciplinas. También tienes que ver cuestiones de carácter económico, porque al final la protección de activos intangibles está dentro del libre mercado, es un derecho de exclusiva que se protege frente a terceros que no van a poder usar ese derecho que tú estás protegiendo. Por lo tanto, tienes que analizarlo en el contexto económico del mercado. Es muy técnico, pero lo bueno es que hay pocos especialistas. Todavía es un campo que está sin explorar en ese sentido. Creo que la gente que en estos primeros años se forme de verdad con buenos programas y al lado de buenos profesionales se encontrará con un nicho de mercado y de contratación muy interesante.
¿Tendrá continuidad este Congreso?
María José. Por supuesto, por eso le hemos denominado Primer Congreso de Derecho de Derecho Empresarial: Inteligencia Artificial, LegalTech & Compliance. Actualizaremos los contenidos según la realidad legal del momento y según los intereses que se vayan generando, tanto por la parte académica como por la parte del profesional. Asimismo, promoveremos alguna jornada en otros ámbitos jurídicos de actualidad. Además, en el próximo curso académico ya incorporamos a estudiantes de posgrado a través del Máster de Acceso a la Abogacía y la Procura, y este perfil de estudiante es más específico.
Miriam. Hemos puesto Primer Congreso en derecho empresarial para que lo que venga después de los dos puntos sea el apellido que nos puede actualizar el contenido para adaptarnos a la realidad.
María José. Nuestra propuesta, por parte del rector y del equipo de dirección de la Universidad, es darle continuidad al Congreso en Derecho Empresarial para después asignarle los apellidos según lo que esté siendo relevante o de actualidad jurídica en ese momento.
Miriam. Y además, queremos darle continuidad para que no se quede solamente en un Congreso., y por ello estamos preparando una obra colectiva que aparecerá en los próximos meses con las ponencias del Congreso
María José. Y estamos trabajando también en un proyecto de investigación vinculado a cuestiones empresariales, Derechos Humanos, Objetivos de Desarrollo Sostenible… Asimismo, buscamos el derecho empresarial que podemos aunar a quienes tienen interés por el ámbito público y a quienes tienen interés por el ámbito privado. Al final no te puedes limitar exclusivamente al derecho mercantil, porque la gestión de la actividad empresarial también se encuentra impactada por otros órdenes, como puede ser la actuación de las Administraciones públicas.
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